5 - 06 - 2021 / GIJÓN - LA ÑORA - LA LLOREA

Con un día de sol en una mañana fresca, nos reunimos en Gijón, junto a La Madre del emigrante, también conocida popularmente como La lloca del Rinconín; es una escultura de Ramón Muriedas en bronce, representando a la madre que espera a los hijos que se fueron al mar; fue inaugurada en 1970 con múltiples críticas porque se esperaba una escultura mas clásica. En 1976 sufrió un importante daño y no fue reparada hasta 1995 por Francisco González Macías, modificándose la inscripción del pedestal que fue sustituida por el poema Al son del agua, del poeta gijonés Alfonso Camín. En 2004 fue restaurada en su totalidad y en el 2012, necesitó reparar los daños vandálicos sobre la mano derecha.

Desde allí, siguiendo el trazado de la costa por el acantilado, llegamos a la Providencia; el mar de azul intenso, como el cielo, en calma y con la luz intensa que había, mas parecía el Mediterráneo que nuestro bravo Cantábrico…
A medida que avanzamos, vamos teniendo una vista panorámica de Gijón y su playa; el trazado, de cemento con piedras grandes e irregulares incrustadas, se nos antoja un error: irregular y caro. Pasamos por delante de la casa de Rosario Acuña y a medida que ascendemos y tomamos altura, disfrutamos del mar y su inmensidad con la playa de Peñarrubia abajo.

Mas adelante pasamos por un área de recreo con mesas y bancos y un resto del barco Castillo de Salas, hundido hace años en las costas de Gijón; siguiendo ruta, llegamos al parque de La Providencia, precioso, con unas vistas maravillosas.
La ruta continúa, con unos buenos acantilados, la playa de Estaño, y este tramo, está mucho menos transitado. Hicimos una parada para tomar un aperitivo y continuamos hasta La Ñora: la panorámica desde el otero de la playa, es espectacular…

Descendimos hasta alcanzar la arena, y después de unas cervezas bien frías, comimos nuestros bocadillos con ganas.
Por la tarde continuamos hacia La Llorea, por un camino precioso, lleno de vegetación muy frondoso, siempre al lado del río, donde el sol a penas se filtraba, y que después de un recorrido de pocos kilómetros, llegamos al campo de golf de La Llorea, donde esperamos a que los conductores, regresaran con los coches.

Por último, nos acercamos a ver el museo Asturias si yo pudiera, que Graciano Gallinar Carrio expone en Fano,una colección de monumentos en miniatura al aire libre. El autor, comenzó con las reproducciones del prerrománico asturiano, y continúo con otras obras asturianas: como el santuario de Covadonga, la virgen de La Cueva, el puente de Cangas de Onís….Incluso expone reproducciones de fuera de nuestro país: el Big Ben de Londres, La torre de Pisa, el Coliseo romano…
Hace unos años, decidió mostrar sus obras a la gente y ésta fue la razón principal por la que tuvo que constituir una Asociación sin ánimo de lucro, de la cual él es el único representante.

Al terminar, y delante de la representación de la Cueva de Covadonga, echamos una cantará para despedirnos…

 

El grupo Iniciando ruta La Providencia
Islote Contemplación La Ñora
Hacia La Llorea En el museo Representación del Coliseo