4 - 9 - 2016 / POR EL EMBALSE DE ARBÓN

Después del paréntesis del verano, saldamos una cuenta pendiente que teníamos con Mario ... Fuera de programa, pero con ganas de retomar nuestras escapadas, salimos con un día precioso hacia el occidente. Sin darnos cuenta llegamos a Navia, y al salir del pueblo después de cruzar el puente viejo, tomamos la desviación a la izquierda que nos lleva hacia Boal. En el recorrido, aún quedan restos del teleférico que unía Grandas de Salime con el puerto de Navia para abastecer los materiales necesarios para la construcción de su embalse sobre los años 50 (que en su momento fue el mayor de los construidos en España), y también encontramos por el camino el Castro de Coaña.

En cuanto llegamos a Serandinas, parroquia de Boal, tomamos una desviación a la izquierda hacia el albergue donde se ubica la empresa de turismo activo KALYAVENTURA: interesante escuela-taller, desde donde se ofrecen distintas actividades como recorridos por canoa, conocimiento sobre el mundo rural, fauna y flora de ribera ...  y donde se compaginan los deportes de riesgo y la multi-aventura adaptada a personas con algún tipo de discapacidad (a nuestro entender, de suma importancia)

Allí nuestro guía, monitor y responsable de la excursión Mario, nos dio las instrucciones: inscripción, proporción de material necesario, curso acelerado sobre el arte del remo ... con suma dedicación y paciencia. Con nuestros neoprenos y remos, iniciamos el descenso a través de pista, hacia el río, haciendo parada en un mirador desde donde pudimos contemplar el embalse. El embalse de Arbón, sobre el cauce del río Navia, fue inaugurado en el 1967 y constituye el primer aprovechamiento hidroeléctrico de este río, a 12 Km de la desembocadura en el mar; mas arriba están los embalses de Doiras y Salime.

En cuanto llegamos al embalse, Mario nos dió las últimas recomendaciones: chalecos ajustados y abrochados, modo de abordar con el remo el agua de manera que nos permita avanzar, virar, frenar ... Unos en canoas de dos, otros en una embarcación colectiva; todos abordamos el asunto con ganas y risas... Algunos tardamos en pilar el "tranquillo", otros fueron mas aventajados, pero todos lo pasamos estupendamente...

Comenzamos el recorrido aguas arriba, que al estar estancada, no ofrece ningún tipo de resistencia. Fuimos percibiendo in situ, la vegetación de ribera: arces, fresnos, abedules.. y helechos. A medida que avanzábamos, el embalse se va estrechando y la vegetación mas abundante, llegando a tocarse las ramas de los árboles de una orilla con los de la otra; tuvimos ocasión de ver varias libélulas y mariposas sobre todo negras ...  Y cuando llegamos al río, descendimos de nuestras canoas e hicimos un pequeño recorrido a pie disfrutando de sus aguas transparentes con cantidad de pequeños peces (pescardos) que enseguida tratan de picarte ...  Llegamos a una poza donde alguno se dio un chapuzón y mediante una canoa que Mario arrastró a pie río arriba, nos adentró en pequeños grupos, a través de un pequeño recorrido por un estrechamiento del cauce, a una maravillosa cascada ... 

Como nuestro guía estaba en todo, aprovechó el "recreo" para darnos unas galletinas que nos supieron a gloria... La vuelta nos hizo percibir el recorrido de manera diferente: del estrechamiento a la amplitud, como si nos hiciéramos a la mar ... además el viento nos hizo conscientes en ocasiones, lo que significa ir contra-corriente... Al llegar , nada mas dejar las embarcaciones, nos dimos un buen baño, que entre el neopreno y los chalecos, flotábamos de maravilla y nunca tuvimos sensación de frío.

El retorno hacia el albergue lo hicimos unos a pie y otros en camioneta; ducha caliente, cerveza fría en la terraza al sol y comida estupenda todos juntos. Queremos dejar constancia de lo extraordinario del lugar, los medios con los que cuenta la instalación y sobre todo, nuestro agradecimiento a Mario por su dedicación, eficacia y amabilidad, que nos permitió pasar un día estupendo en su compañía...

Y acabamos la excursión en Campos (Tapia) para visitar una plantación de arándanos ecológicos  (Campos de Herminia) donde iniciaron esta explotación hace tres años, siendo este año el primero de recogida de fruto, y donde nos explicaron pormenorizadamente: se cultivan cuatro tipos de arándonos azules,  requiere suelo ligeramente ácido, debe protegerse del viento, su recogida se realiza manual por mano de obra especializada, para selección y posterior envasado y embalaje, por lo que se realizan varias recolecciones por planta...  todo un trabajo que pudimos apreciar con los frutos sabrosísimos que tuvimos la ocasión de catar directamente de la planta y que después Elio nos proporcionó ya envasados ... Todo un lujo

 

Albergue Serandinas  En el mirador  Mario dándonos instrucciones
Navegando Las distintas navegaciones Río arriba
El chapuzón Después de comer  Campos de Herminia